El hecho ocurrió el pasado sábado 29 de julio, sin embargo se hizo público recién en los últimos días, generando conmoción en Brasil.
Según detallan medios internacionales como La Nación, las víctimas fatales fueron identificadas como Garon Maia y el pequeño Francisco, conocido como Kiko.
De acuerdo al citado portal,y que reprodujo biobiochile.cl, el fatídico día ambos abordaron un Beechcraft Baron 58, un ligero bimotor que puede volar a una velocidad de crucero de 200 nudos (370 km/h).
A las 17:55 local despegaron desde el aeropuerto de Vilhenam en Rondonia, cerca de la frontera con Bolivia. La idea de Garon era dejar a su hijo con su madre, de quien se encontraba separado, en Campo Grande Mato Grosso do Sul.
Si bien el vuelo fue normal durante los primeros ocho minutos, posteriormente desaparecieron del radar.
De acuerdo a las autoridades, la aeronave terminó estrellándose en la selva, en la frontera entre los estados de Rondonia y Mato Grosso, con el pequeño en los controles mientras su padre iba como copiloto.
Los restos de la avioneta, así como los cuerpos, fueron encontrados un día después por los equipos de emergencia.
Tras conocerse lo ocurrido, en redes sociales comenzó a masificarse un video de un vuelo anterior en el que aparece Francisco piloteando una avioneta mientras su padre se toma una cerveza.
Cabe señalar que tras el trágico accidente, la pareja más reciente del empresario, Paula Pridonik, decidió quitarse la vida.
Desde el Centro de Investigación de Prevención de Accidentes Aeronáuticos (Cenipa) comenzaron una investigación para determinar las causas exactas del accidente./